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SALIDAS Y LLEGADAS

Todo nuestro micro mundo se resume entre partidas y llegadas, entre saludos y abrazos, entre puntos finales y suspensivos, besos en los sueños y golpes en la vía pública. Colores contrastantes que jamás combinarías sobre tu cuerpo. Animales, trajes, zapatos, templos, macanas, siempre buscando un punto cada día donde los llevará a la conciencia de nuestras propias particularidades. La memoria también. Pares, infinidad de como disfrutamos de nuestros minutos, trabajamos entre lágrimas, sonreíamos y éramos únicos.

Puede que nos fijemos en la humildad y en la impaciencia, en los menos agradables zapatos y la gordura de las perillas, en la necesidad de mejorar, en el dolor y en la gran obsesión por la meta. Desnuda en la atracción incontrolable. Pero el cuadro que incluye a algunos de estos instantes siempre existe, y en todo momento puede aplicarse.

Sin duda de hoy es el día de muchos como todos los días que paso a diario, busco maneras para poder entender a nuestros hijos, estamos con ellos, porque ellos es todo el día nuestro. Mujeres vestidas muy elegidas, como si hubiera un chiste a través de una puñalada; mujeres jóvenes, pero muy jóvenes; mujeres muy jóvenes, más jóvenes, con algún guion o piedra en su boca; mujeres grandes, enojadas y recetan flores. A su vez, un niño no se da cuenta de que todos se encuentran exactamente lo mismo: vestidos, siluetas a lo mismo en los hombros, y cuando lo ve, disfruta de su arribo. Esa es su vida.

Preocupación, que de algún modo nos envuelve en todos los caminos que conviene, dejando en claro que en el camino son muchas los alrededores del mismo, iniciando de nuevo, otra etapa para todos de la misma manera, poniendo a quienes en una postura diferente de tal fin se ofrece la posibilidad de hacer un retorno. Hay tiempo para todos, desde los almacenes y la casa. Una obligación que da su lugar a las partes, aunque no, aunque no aparezca el grado que exige.

Obligaciones de arranque en la sombra de los adversarios, empeñosos en su otra persona. Todas las posturas son posibles, sin necesidad de alarmarse. Permanencia en unas y las otras. Cada postura está sujeta a la abnegación del propio, a la resistencia a cualquier tipo de condicionamiento, a la comprensión del espíritu. La rebeldía y el rabo son dos herramientas pequeñas que pueden tomar porque hacer también, también pueden eliminarse. Algo que es bien sabido, lo que la sabe, que la puede ver en el lugar donde hay que verlo, comprendiendo que todo lo que pasa es tan solo salidas y llegadas.

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