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LA INCREIBLE ZONA MUERTA

Los seres humanos en este planeta suave, en menor o en mayor medida, o en excesiva temperancia, rellenan y digo rellenan, porque en muchas oportunidades no saben y los asusta las zonas muertas de su vida. Esas zonas muertas, esos solidos espacios de vacitud insoportable, los aterran. Ven su mundo desmoronarse, todo se desquebraja a su alrededor. Algunos lo utilizan como disparadores de recolección cósmica, viajan despreocupados interactuando con cuanto fantasma y jorobadito aparece o cuanta realidad aumentada de sensaciones lo sorprende y maravilla. Es otra maravilla.

De esta forma no se siente con la naturaleza, es un uso único de la inteligencia para arrancar una realidad que no es real ni está ni se ve. Uno se da cuenta de que no es el mundo real, en primer lugar porque ni siquiera no es esloveno. Y seguramente no el mismo en todas las partes. No sé a dónde empieza el origen de esa desparramada de tejidos que hay en cada pieza, un símbolo que aparece haciendo declaraciones de brujería (algunos teorías) pero el mejor cuadro de respeto de eso es “Sin Límites al Macho o la Hembra”. Porque parece que somos, para cuando se nos pregunta “¿ha empezado el tiempo de violines?”. Claro que no mortales. Es otra la música
.
Manejando con la vista puesta sobre nuestro amigo, el amigo con la cabeza a sin capa ni fundido. En ese sentido, somos mejor de quienes se encuentran en un ámbito donde no los creen y ahí es donde se encuentran también algunos otros padecimientos conocidos por los expertos, como de culto. Es otro culto.

Este hombre se sube unos cuantos escalones, porque tiene forma de pensar: llegar a un lugar donde sabe si se hallan algunos. Realmente no se aterra, en vez da un lugar donde pueda haber algunos. Que todos tienen excusas. Es otra excusa. Mantiene siempre bajo control. Lo que no se puede creer es el resultado de una labor detrás de la roca: encontrar un lugar en el que se encuentre ámbito seguro. De manera que, por medio de una impresión distinta, el sentimiento desagradable de lo que se le ocurre no lo puede resistir, aunque para unos puede parecer que hay razones y asimismo un efecto psicoactivo. Un cierto estado de vergüenza se siente con dolor, un dolor a cual no se resistirá. Y en vez de eso, pondrá una mesa y para desayunar acompañado, almorzar acompañado, cenar acompañado bajo los mismos criterios de ternura todos los días.

¿Excusas? Somos un mundo en que cada cual, según su destino, debe ser elegido. Y solo para hipersensibles de zonas muertas, viajeros de zonas muertas, llenándose de amores imposibles de posibles que esparcen las energías primigenias que beben a solas conquienes se animan también. Es de una entrega infinita. Amoroso, sensible y emocionante. Asi se termina, sensible y emocional. Es otro animarse.

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