El liderazgo no es una estrategia, no es un pormenorizado estudio de las situaciones. El liderazgo se encuentra por encima de cualquier manual de usuario advenedizo que quiera conducir los destinos de una nación. Conducirla, no estrellarla. Pero en general y con muchas manchas mas en el tigre, La Argentina, se caracteriza por actores de vodevil, y lo que es peor, en muchas oportunidades tienen publico de vodevil, y esto no es por menospreciar el género teatral.
Es simplemente para retratar una escena grotesca en el que el final poca importa, si durante lo que dure la obra política, estos actor-dirigentes mantienen en vilo a la audiencia. Una vez terminada la temporada ya habrán pasado muchas veces por el bordereau.
Lo deslumbrante, que el publico seguirá consumiendo la obra desastrosa, pero por razones insospechadas espere la nueva temporada que ya se anuncia. Y se entusiasman ya que en esta oportunidad vez, han renovado el staff, la música, el decorado y el vestuario es deslumbrante. El único problema que la entrada ahora cuesta más del doble. Y bueno, se consuelan, es la Argentina. Tenemos inflación.
Obras teatrales que llevan repitiéndose décadas en todo el país. Generaciones y generaciones que no desean perdérsela, o que por más que quisieran no hay manera. Se ha intentado casi todo. Hemos tenido primeros actores (mandatarios) de origen árabes, españoles, italianos, vascos, greco-venecianos. Pero nada, el mismo fiasco. El público no se desalienta, y por una extraña sensación de superveniencia, se auto convence que la próxima temporada va ser distinta.
Extraña autoflagelación del gen-argentus que flamea como su bandera sin endurecer, salvo raras excepciones su voz de cansancio y hastió se alza.
Hasta el pueblo-publico tiene un concepto exagerado del liderazgo y por alguna razón se lo delega a noveles actores que en definitiva solo hablan bonito.
Hasta los dirigentes políticos tienen un concepto exagerado de liderazgo. En fracción de segundos una vez coronados invierten la carga del mandato popular por el divino. Desaprensiva metamorfosis en la que les crecen alas, alas que terminan indefectiblemente en el viaje de Fénix. Mas que un ave mítica, un pollo. La posibilidad de que un nombre pueda cambiar hasta donde hace algunos años no supo ser cierto, no se les puede ocultar, porque la verdadera responsabilidad es de los demás. Nunca del ave.
Sin embargo, sobre tanto desatino, hay algunos elementos importantes que quedan en claro, como las claves de que siempre en el camino para ser un líder importante y comprensivo, así como también para ser un líder que sea respetado.
Luego de estos años de vendaval la llegada de la temporada navideña nos deja cierta sensación de confusión. Muchos aires no han tenido que pasar para descubrir lo que viven. Además, algunos se llevan el control de las cosas desde hace años. Puede que estén buscando esa sensación de miedo a lo que está ocurriendo o por ocurrir.