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DELIBERADAMENTE (POEM)

DELIBERADAMENTE (POEM)

Por Francis Berti

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Porque no hay nombre que pueda abarcar la deliberación del ser. Ni un título que me encasille en la brutalidad o en lo conmovedor. He sido la mano que destruye y el suspiro que consuela. En la misma respiración, me he sentido como un milagro y una mera estadística. La selección de quién soy es una farsa, una trampa del lenguaje. En un momento, la carne que me sostiene es real, tan palpable como el latido; al siguiente, me siento una ausencia que solo el recuerdo de otros puede llenar. Soy el espacio que ocupo y el espacio que anhelo, la contradicción viviente.

Esta tarjeta de presentación en blanco no es una omisión. Es una declaración ontológica. Es el único documento honesto que podría darte. Porque cualquier palabra que pusiera allí sería una mentira por el simple hecho de ser una elección, un recorte de la verdad total. Pretender que soy “humano” es ignorar el vasto universo de lo que también soy. Aferrarme a “universal” es olvidar la singularidad de cada cicatriz. Mi identidad no es una lista de adjetivos, sino la danza de todos ellos a la vez. Un caos que me define más que cualquier orden.

Y en esa incongruencia, en ese vacío de nombre, está la única verdad innegociable. La sostenibilidad de mi existencia no depende de lo que digo ser, sino de la capacidad de mi subconsciente para albergar todas estas contradicciones sin colapsar. La parálisis de lo que soy se rompe con la revolución de lo que seré, y viceversa. Así que toma la tarjeta. Siente el peso de su nada. Y en ese blanco, en esa absoluta falta de definición, intenta leerme. Quizás descubras, en mi silencio, el eco de tu propia incoherencia.

1 pensamiento en “DELIBERADAMENTE (POEM)”

  1. Guadalupe Elvira Blanco

    Deliberante, me encantó, hermosa asonancia que a diferencia de la consonancia estableces semejanza entre dos palabras, como dices no
    hay nombre que pueda abarcar la deliberación del ser.Ni brutal ni conmovedor, no destruyes pero si liberas, el ser humano integrado en la descripción de esas palabras es tan palpable como el latido que sale de tu corazón por vivir Estamos hechos de homonimos y antónimos como un recorte de la verdad total, que te hace humano y a la vez parte del vasto
    Universal que te define. Hermoso. Gracias FRANCiS.

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